Fresa, lamento sinceramente que estés pasando por este mal momento y espero con ansia tu mejoría. Sea cual sea tu enfermedad saldrás bien librada de ésta, estoy seguro. Cuidate mucho niña, tus amigos te extrañamos mucho por aquí.
Felicidad de los cristales mudos
En el aliento calado de tu boca
Al cruce de tus dedos que convocan
Caricias con símbolos desnudos.
Fragilidad de los eternos nudos
De mi memoria callada cuando te evoca
Presentes y pasados, cuando aboca
Las palabras y las reduce en sus embudos.
No pasa nada; toda permaneces,
Como la luna en el paisaje
O la estrella del norte en el mar.
Intacta a cualquier roce tantas veces,
Inmóvil como rastro de los viajes
Eterna, cual musa misteriosa.
Besos